Tres marcas que reaprovechan alimentos de formas que no sabías
Salvados Beer - la cerveza artesanal que salva pan
En España se desperdician 62,3 millones de kg de pan al año (Fuente: Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación - MAPA - 2018). Por eso, esta cerveza artesanal made in Barcelona combate el desperdicio de alimentos incorporando ese pan que de otra manera hubiera sido desperdiciado en la receta de su cerveza.
Su proceso de producción se basa en la economía circular, utilizando el pan recuperado que remplaza una parte de la cebada, dándole vida a una cerveza llena de sabor e innovación. Ahora están terminando una campaña de crowdfunding para poder crecer y salvar más comida ya que en un futuro, quieren introducir nuevos sabores salvando nuevos alimentos.
Fungalogic - construcción a base de... ¿comida?
Así es. Fungalogic es una start-up holandesa que crea material de construcción a base de los restos agrícolas locales. Concretamente, estos emprendedores estudian cómo aplicar el micelio de los hongos para uso estructural o de aislamiento creando nuevos materiales ¡totalmente compostables
Los hongos les permiten reaprovechar el desperdicio agrícola de los cultivos en buenos materiales para una construcción mucho más natural y saludable para nosotros, ya que el micelio seco, la propia red natural de los hongos, sirve como pegamento natural y froma estructura bien estable.
Ananas Anam - moda contra el desperdicio de alimentos
En el mundo de la moda también encontramos iniciativas que, además de dar un nuevo uso a los desperdicios, dan un paso más allá y exploran maneras de crear ropa totalmente biodegradable a partir de fibra textil hecha por restos de alimentos.
Ananas Anam, fundada por la española Carmen Hinojosa, rescata los excedentes de la producción de piña en Filipinas, las hojas, y las transforma en una nueva fibra textil llamada Piñatex, una “piel alternativa" para bolsos, zapatos e incluso muebles. Además, contribuye al desarrollo de la comunidad filipina.